En la dura posguerra española, los materiales escaseaban y los proyectos también. Solo existían las escuelas de arquitectura de Madrid y Barcelona, donde en cada una de ellas se licenciaban unos quince arquitectos al año. El Fomento de las Artes Decorativas creó en 1958 los Premios FAD de Arquitectura e Interiorismo. Desde entonces, los Premios FAD han ido galardonando año tras año las mejores obras de la arquitectura barcelonesa, catalana e ibérica, hasta convertirse en los premios más antiguos de Europa —y quizás del mundo— y en unos de los más prestigiosos.
Arquitectura en sintonía con el paisaje físico y humano
Mariona Benedito, profesora del Grado en Diseño del itinerario de Espacios, es finalista en el apartado de Arquitectura con el proyecto 79 Habitatges amb protección al Saló Central de Sant Boi de Llobregat, realizado en colaboración con Martí Sanz, Juan Herreros y Jens Richter.
El jurado, en su valoración, destacó: “Una cuidadosa exploración tipológica del bloque aislado de vivienda, que incorpora patios y perforaciones del volumen para generar espacio comunitario como lugar de transición entre la gran escala de una situación exterior todavía en construcción y la escala doméstica, humana y acogedora de las viviendas”.
BAU para la Bauhaus
En el apartado de Pensamiento y Crítica, es finalista el proyecto Bauhaus Museum Dessau Cahier Series de Moritz Kúng, que cuenta con el diseño gráfico de Oficina de Disseny, estudio fundado por la alumni Katharina Hetzeneder y por la colaboradora de BAU Ariadna Serrahima.
El jurado destacó de la pieza: “Centrado en una obra de arquitectura contemporánea, este trabajo editorial permite articular un conjunto notable de contribuciones interdisciplinarias que no solo amplían los significados y las formas de leer toda obra, sino que también consolidan un notable esfuerzo de pensamiento y crítica”